La sal

Los beneficios de la sal se conocen desde la antigüedad; es suficiente recordar el rol cumplido en la conservación de los alimentos gracias a su acción antibacteriana. Sus efectos benéficos en el hombre son descubiertos a mediados del siglo decimonoveno, cuando un médico polaco, el doctor Felix Boczkowski pone en relación las buenas condiciones de salud de quienes trabajaban en las minas de sal con su ambiente de trabajo. En 1843, el doctor Boczkowski decidió profundizar las que hasta ese momento habían sido sólo intuiciones y comprendió que los efectos benéficos de las minas se debían a los micro elementos presentes en el medio ambiente y a su concentración, así como a la temperatura y a la humedad. Dio así vida a la “haloterapia” (de “halos”, en griego “sal”), un método natural no invasivo de terapia, muy sencillo que prevé, por un lado, la inhalación por las vías respiratorias de aerosoles salinos en seco, y por el otro su absorción a través de la piel.

Hoy, con el progreso de la tecnología, estamos en condiciones de reproducir el microclima correcto para aprovechar de la mejor manera las propiedades benéficas de la sal también en el ámbito de las problemáticas respiratorias de los equinos. El tratamiento se lleva a cabo en un box de caballeriza normal, desprovisto de cama, en cuyo exterior, sobre una pared es aplicado el dispensador salino en seco Aerosalhorse considerado dispositivo médico veterinario; en el interior del aerosol salino es introducida una dosis estandarizada de NaCl, como accesorio del dispensador salino Aerosalhorse®. El box es entonces sellado de manera que se permita al aire contenido mantener la concentración de sal micronizada deseada.

Una vez inhalado, el cloruro de sodio micronizado, va a actuar a nivel del aparato respiratorio favoreciendo, a través de un gradiente de presión osmótica (diferente concentración salina entre el exterior de la membrana celular y su interior) la mejor hidratación de las mucosas del aparato respiratorio y una consiguiente fluidificación del moco favoreciendo por ende la reducción de una serie de afecciones tales como COPD IAD Y RAO.

La sal de “aerosol”

La sal utilizada es una mezcla optimizada de cloruro de sodio y yoduro de sodio para reproducir de la mejor manera el microclima marino y para mantener correctamente el nivel de exposición al yodo. La dosis introducida en el dispensador salino es micronizada, controlada y envasada en pertinentes sobrecitos sellados al vacío para garantizar sus características, en el laboratorio de la empresa. Para la preparación de la mezcla son utilizados dos tipos de sal (NaCl): la sal RG (According to Ph Eur Current Edition) y la sal yodada ESCO. Se especifica que la cantidad de yodo presente en la sal ESCO y difundida en la cabina no constituye una cantidad farmacológicamente significativa a efectos del alcance de una actividad terapéutica.

El laboratorio

La empresa cuenta con un laboratorio pertinente equipado para la micronización, el control y el envasado de las dosis de sal a introducir en el dispensador de aerosol salino en seco para garantizar una dosificación controlada.